Después de pasar unos días en las playas de Ibiza junto a familiares y amigos, Leo Messi sigue disfrutando del verano europeo pero ahora en su casa en Barcelona.
Antes de retomar sus entrenamientos con el Barcelona, el mejor jugador del mundo se divierte con su esposa, Antonella Roccuzzo, sus tres hijos y su enorme perro Hulk.
El fin de semana, Anto lo filmó jugando a la pelota con su mascota y subió al video a su cuenta de Instagram. Asombrado por el talento de su papá, Thiago exclamó: "es muy bueno jugando al fútbol".